lunes, 17 de agosto de 2009

ल्लेगो उन दिया

Llegó un día despejado, de reojo miras el agua y sus ondas, sus frágiles reflejos...

Para que no vuelvas, el tiempo pasa en una hora
y un dolor profundo se hace ciego pero grita por las manos
y el estómago se retuerce,
hay un día que es mi día… prepáralo.

Es verde, es azul y verde…
silénciate por un momento... que para que gires tu rostro,
necesitas silencio y distancia… y agua, sus ondas y frágiles reflejos
anhelando inundar tu desnudez,
la locura hermosa de tu muerte, el milagro de tu fruto.